Estos días he hecho tres nuevas matriuskas, en realidad cuatro, pero como soy un desastre como fotógrafa me despiste de hacerle la foto a una de ellas.
Todas están totalmente hechas a mano, ribeteadas con hilos a juego con el fieltro, y decoradas para quedar muy femeninas.
Confieso que tengo predilección por el rojo y en verano por las rayas marineras o como ahora se conoce navy.
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